Un día un joven caminando muchos años y llegando a tierras muy lejanas encontró un labrador trabajando la tierra y le preguntó: ¿Cómo puedo aprender lo que haces tú? Yo te puedo enseñar le contesto aquel hombre sudoroso y cansado, el aire y sol habían envejecido su rostro. Le contesta el caminante: hace muchos años recuerdo, mi padre lo hacía, pero yo lo abandone desde que era muy pequeño y me fui por el mundo a navegar y nunca he podido encontrar el camino para regresar con mi Padre que abandone.
Al labrador se le alegró la mirada hacia mucho tiempo su hijo lo abandono y siempre le pidió a Dios que le regresara su pequeño.
¡Gracias Señor por este milagro tan grande!... ¡Su hijo había regresado!... Cuantas veces nos vamos por un camino equivocado y Dios espera nuestro regreso arrepentido y recibirnos entre sus brazos. “Señor enséñame el camino para poder llegar a ti como el caminante y el sembrador”.
En una ocasión un hombre comerciante envió a su hijo a comprar determinada mercancía, pero el hijo no volvió, sino hasta el día siguiente. Su padre preocupado, pasó toda la noche en vela esperándolo, y oraba a Dios para que lo librara de todo mal. Pronto se escuchó un ruido en la sala y el padre corrió a ver si era su hijo que había llegado, y al ver que si era, se emocionó.Ese hijo con lágrimas en los ojos le dice a su padre “padre te he faltado” ¿por qué hijo? -Exclamo el padre- porque olvidé por un momento con cuánto esfuerzo te ganas el pan diario y no me importó, y gaste todo el dinero que me diste con unos “amigos” ¡perdón Padre! Te disculpo hijo –dijo el Padre-
Cuántas veces le hemos faltado a Dios, pero cuando vamos a Él, con un corazón contrito y humillado Él siempre nos perdona. Porque aunque nosotros somos imperfectos… Él es perfecto, justo y fiel.
Es por ese motivo que día a día debemos pedirle a nuestro Padre Celestial que nos perfeccione en su amor, que nos lave, que nos purifique y que nos moldee como cual vasija de barro en sus manos.
Es por ese motivo que día a día debemos pedirle a nuestro Padre Celestial que nos perfeccione en su amor, que nos lave, que nos purifique y que nos moldee como cual vasija de barro en sus manos.
Un corazón vacío solamente puede ser llenado por Aquel que todo lo puede, por Aquel que murió por ti, por Aquel que te ama...Jesús...
Dios nunca te dejará en tus momentos de angustia, soledad y tristeza. Dios nunca abandona. Él siempre tiene la respuesta para sus hijos, aunque a veces se alejen de Él...
Dios nunca te dejará en tus momentos de angustia, soledad y tristeza. Dios nunca abandona. Él siempre tiene la respuesta para sus hijos, aunque a veces se alejen de Él...
No hay silencio que Dios, no entienda, ni tristezas de las que Él, no sepa. No hay amor que Él ignore, ni lagrimas que no valor.. porque... Él te ama.
Dios tiene para ti la clave para cada problema, una luz para cada sombra, un remedio para cada dolor y un plan nuevo para cada día. Bendiciones de Dios para ti...
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